marzo 4th
Esto sólo lo arreglamos entre todos… pagando.
Seguro que el título de este post les suena de algo. Ya se están ocupando de que les suene. Se trata de la última gran iniciativa buenrollista para infundirnos ánimos en esta crisis interminable. O, mejor dicho, para infundirnos ganas de quemar (otra vez) la tarjeta de crédito. La campaña, en la que se han invertido cuatro millones de euros, se difunde desde hace unos días en prensa, radio, televisión y sobre todo, Internet. Su eslogan es el dominio estosololoarreglamosentretodos.org. El logo lo componen las letras OK en vertical, creando un muñequito muy naif que si se mirase en un charco de este lluvioso invierno vería sólo las letras KO. Tras ella se encuentran el Consejo Superior de Cámaras de Comercio y dieciocho grandes empresas españolas, como Mapfre, Mercadona, Repsol, BBVA, Iberia o El Corte Inglés.
El caso es que esta campaña parte de un principio muy cierto, y es que el pesimismo no lleva a ningún buen puerto. Todos sabemos que esta crisis económica es también una crisis de estado de ánimo y que el primer paso para solucionar cualquier problema es plantarle cara con actitud positiva. La autocompasión es uno de los estados más deplorables. Mi admirado Juan José Millás lo explica perfectamente en este vídeo. También es verdad que casi todos, con la excepción de un Partido Político que yo me sé, estamos ávidos de buenas noticias, de datos que digan que esto empieza a marchar de nuevo. Hasta ahí de acuerdo.
Ahora bien, que las mismas empresas que se aprovecharon de las exiguas nóminas de muchos ingenuos para colocarles hipotecas estratosféricas (en concreto, hablo del BBVA y del Santander), las mismas que despiden trabajadores pero cuyos directivos se frotan las manos enérgicamente con sabrosos dividendos aún en estos tiempos, nos digan estas cosas, es de traca. Yo te pongo en la puta calle, pero tú sonríe, hombre, que la cosa no está tan mal.
Confieso que, como periodista, la opinión pública es un tema que me apasiona. Es del todo increíble lo maleable que es. Del mismo modo en que en su día nos convencieron de que con un sueldo de mil euros podíamos pagar una hipoteca, un coche y unas vacaciones en el Caribe; de la misma manera en que un buen día nos cortaron el rollo diciendo que se acabó el malgastar, hoy pretenden insuflar ánimos al consumo, ahora que nos lo pensamos dos veces antes de gastar y eso les hace pupita.
Que el mensaje proceda de tal fuente y se atreva a pluralizar para involucrarnos roza lo insultante. ¿Acaso se nos puede pedir al pueblo español que hagamos más de lo que estamos haciendo? ¿Es justo pedirnos esto a quienes lo sufrimos sin haberlo provocado? Comprobarán ustedes el tufo que desprende el hecho de que ni un sólo columnista de un diario español se atreva a disentir al respecto. Parece que ese buen rollo también les ha afectado a ellos y oigan, todos con la sonrisa de oreja a oreja, no vaya a ser que el anunciante estrella se mosquee.
Como los ciudadanos seremos pobres pero no tontos, ya se ha creado la contracampaña, titulada Esto deberían arreglarlo los que lo jodieron. Pura sabiduría popular. En Facebook ya tienen más de 32.000 seguidores, yo entre ellos. Les animo a unirse y dar a esos buenrollistas de laboratorio con abultadas nóminas de bruces contra la realidad.
comment-1144
Coincido en que puede tener gran parte de connotaciones comerciales para animar a la sociedad a continuar alimentando el entramado empresarial, pero ¡es que tiene que ser así!
Es decir, si la gente no compra ropa, las tiendas empiezan a reducir producción, y por tanto ventas y beneficios, y como no, puestos de trabajo.
Pero es que, desde mi punto de vista, esta 'apelación a la colaboración de todos' alude directamente a la necesidad de asumir nuestra parte de responsabilidad. Es decir, en el sistema en el que estamos, 'todos somos capitalistas'. La señora que tiene una frutería, ha invertido todo su capital en él, por tanto, le interesa que la situación mejore y para ello, la forma que la pobre mujer puede tener es la de ayudar a crear un nuevo clima más optimista en su día a día.
Claro que las grandes empresas tiene parte de responsabilidad, pero también es cierto que son el futuro. España no puede seguir siendo un país de Servicios, porque el sector tiene los días contados y es discontinuo. La industria (y el I+D) es la que puede reflotar una situación como esta. Y muchas de estas empresas están apostando por desarrollarse en un contexto que no es nada favorable.
Además, no podemos meter en el mismo saco a todo el entramado empresarial: Mango o Iberia no conceden créditos, por lo que no se les puede acusar a la ligera de 'ahogar con sus hipotecas'. Pero es que, por otro lado, los bancos no han obligado a nadie a hipotecarse. Y si miramos el germen de la actual coyuntura económica en España, tenemos que focalizarnos en el sector de la construcción…y cuántos empleados de este sector se han dedicado a ahorrar o invertir lo que ganaban?
En resumen, estamos en una situación en la que no tenemos que olvidar cómo y por qué surgió esta crisis; no podemos eximir de responsabilidad a las grandes empresas ni a la clase política, pero sobre todo, no podemos verlo todo como algo ajeno a nosotros, porque nos afecta directamente. No es como ver a Callejeros en África grabando poblados que se mueren de hambre. Es ver a nuestro vecino sin trabajo y con 3 críos. Y si nos afecta directamente, seamos culpables o no, tenemos la necesidad y la responsabilidad de actuar. Es instinto humano al fin y al cabo.
comment-1143
chico, he entrado en tu blog por un comentario que hiciste al artículo de la generación nini del pais. he leido varias entradas…
me gusta como escribes y me parece que tienes sentido común, nada desdeñable
que jodido que curres en una tienda de ropa, yo curro de secretaria-sirvienta mileurista para un baboso y también soy licenciada
igual pienso que estamos mejor que los que están intentando cruzar el estrecho en patera, o los que sacan coltán de una mina, las niñas prostitutas de tailandia, las afganas, los sidaticos de malasya, la lista es eteeerna
la realidad es que si te paras a pensar no se entiende cuál es el sentido de la vida, de todo esto sea nuestro esclavismo refinado en las sociedades cómodas o el infierno extremo de otros países
creo que el ser humano en general no sabe vivir, no sabe crear sociedad, somos una especie de retrasados
Laura
comment-1142
Bien por JL 🙂
comment-1141
Yo no diría que tiene "connotaciones comerciales", sino que es un spot comercial en toda regla edulcorado para imbéciles, envuelto en un cinismo inmenso.
Claro que los ciudadanos tenemos una parte de culpa en toda esta crisis, pero la diferencia con respecto a las grandes empresas (que están tras esta camapaña) es que nosotros sí pagamos por ello: con nuestros sueldos, nuestro trabajo o nuestro paro, nuestras nóminas, nuestras hipotecas o alquileres… mientras ellas siguen teniendo unos beneficios tremendos aún en crisis. ¿Son ellas quienes han de lanzar entonces este mensaje? ¿Las mismas que hacen ERE's?
Si de algo bueno sirve esta situación es precisamente para que cada uno se lo piense dos veces antes de comprar y consuma sólo en la medida de sus posibilidades. Pero eso no le gusta a la Publicidad.
comment-1133
He encontrado el blog haciendo zapping de blogs por la red y a este post tengo algo que decir:
¡Olé! Este post me ha encantado, te felicito. Y es cierto que esta campaña suena contradictoria cuando hace unos meses nos decían que cortasemos el consumismo porque la cosa se iba a poner fea. Esto que lo arregle quien lo ha jodido y el ciudadano de a pie, que da el cayo todos los días vuelva a vivir sin la preocupación de que el banco embarga la casa o no.
Quizás no sea una opinión bien construida, pero básicamente es lo que yo opino al respecto.
Me gustaría tenerte enlazado en mi blog si es posible. Felicidades, de nuevo, por el post.
A reveure!
comment-1132
¡Gracias, Joanet! Me alegro que te haya gustado. Echaré un vistazo a tu blog ahora mismo.